Primera derrota de Katie Taylor en su regreso a casa

Chantelle Cameron fue la encargada de arrebatar el invicto profesional a Katie Taylor delante de su país. // Foto Matchroom 

Era la primera vez en su carrera como boxeadora profesional que Katie Taylor peleaba en su país de origen. Su combate ante la británica Chantelle Cameron se saldó negativamente por decisión mayoritaria, en lo que era también la primera derrota para la de Bray. En un 3Arena a abarrotar y con la presencia del afamado también irlandés Conor McGregor, Taylor reclamó una revancha que se podría llevar a cabo en otoño, de nuevo en Dublin.

Fin de semana aciago en lo deportivo para el país de Irlanda. Durante la tarde del sábado en la capital, los dublinenses contemplaban la derrota en del Leinster en el AVIVA Stadium en la final de la Copa de Europa de rugby ante La Rochelle por segundo año consecutivo. Horas después, todas las miradas puestas en el gran orgullo irlandés de los últimos años: la boxeadora de Bray y oro olímpico Katie Taylor. Pero el trago se volvería más amargo para el público irlandés que presenció la velada en un 3Arena con todo vendido. Los tres peleadores locales fueron derrotados en el evento: Taylor, Garay Cully y Dennis Hogan.

Una desdichada vuelta a casa, que por mucho tiempo fue esperada. Quizás no de esta manera. Chantelle Cameron ahogó las esperanzas de un ‘homecoming’ tantas veces soñado al vencer a Katie Taylor en el combate principal reteniendo su condición de campeona indiscutible de peso superligero. Durante los 10 asaltos, la inglesa mantuvo toda la presión local. La diferencia de peso se hizo notar. Taylor tuvo que acostumbrarse a un pesaje diferente al habitual en la categoría de superligero. Subió a las 140 libras para tratar de arrebatar las cuatro fajas que ha conseguido mantener Cameron. Su estrategia no se pudo ejecutar, sufrió su primer revés en cualquier categoría desde que fue eliminada en los cuartos de final de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016 donde defendía el oro de Londres 2012.

El 3Arena de Dublin fue finalmente el escenario para acoger el regreso a casa de Katie Taylor. Todo ‘sold out’ como era de esperar. // Foto Matchroom

Tras un combate cerrado y que podría haberse decantado para cualquier lado de la balanza, la decisión final de los jueces fue 95-95, 96-94 y 96-94 a favor de la visitante. “No estoy segura para ser honesta, tengo que regresar y mirarla”, dijo la púgil irlandesa al cuestionarla sobre la decisión final. Tras ella, se tomó un tiempo necesario para agradecer el apoyo a los aficionados al pugilismo, también a Chantelle por brindarle la oportunidad de disputar sus cinturones. Tomó aire y lanzó al aire la oportunidad de una revancha próxima. “Me quedé corta esta noche”, sentenció. 

Eddie Hearn, de Matchroom Boxing y promotor de ambas boxeadoras, valoró la velada calificando el último combate como una gran pelea, “pudo irse para cualquier lado”, y marcó un nuevo objetivo en el calendario a falta de confirmaciones, “la revancha será en el otoño de este año en Dublín”, aseguró Hearn. Sin embargo, la ganadora tiene mucho que decir en todo esto. Cameron en sus declaraciones añadió a la historia que está “harta de mantener mis cinturones”, y agregó que quiere ir a por más. Lo que tal vez indique que podría optar por una pelea de características diferentes, o tal vez incluso cambiar las tornas bajando de peso a las 135 libras y poner en jaque los cinturones de Taylor. Tiene su derecho y lo demostró. 

La británica arriesgó sus títulos, aún sabiendo que tendría a la mayoría del público en su contra, y ganó. El resultado: otro combate histórico para la historia del boxeo femenino. // Foto Matchroom

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