Se requieren fuertes “cambios y sacrificios” para cumplir las metas ambientales del gobierno
El Consejo de Ministros ha sido advertido de que, para alcanzar los nuevos objetivos climáticos, será necesario introducir cambios sin precedentes en los estilos de vida, los modelos empresariales y la reducción de emisiones antes de 2030.
Los ministros recibieron la semana pasada un informe elaborado por la consultora McKinsey and Company, que examinó el impacto socioeconómico de los nuevos límites máximos de emisiones de carbono, un informe que el Sinn Féin dijo que esperaba ver antes de comprometerse con los objetivos de emisiones.
El Gobierno dio a conocer la semana pasada los recortes de emisiones que cada sector tendría que alcanzar para lograr una reducción global de las emisiones de gases de efecto invernadero del 51% para 2030.
Se trata de una reducción del 25% en la agricultura, del 75% en la electricidad, del 50% en el transporte, del 45% en los edificios comerciales y públicos, del 40% en los edificios residenciales y del 35% en la industria.
Según una nota entregada a los ministros, la consecución de los objetivos jurídicamente vinculantes implicará un cambio significativo en el estilo de vida de los ciudadanos y en los modelos de negocio de aquí a 2030.
"Está claro que su cumplimiento requerirá compromisos políticos muy difíciles y una intensa colaboración entre los departamentos del Gobierno y con las partes interesadas de toda la economía. Los departamentos tendrán que diseñar políticas muy claras".
"La consecución de los objetivos requerirá que los hogares tomen decisiones de inversión a favor de los vehículos eléctricos y de la readaptación de los edificios a una escala muy superior a la que se observa actualmente en la economía."