Irlanda se aleja de sus metas ambientales
Según la Agencia de Protección del Medio Ambiente (EPA), será necesaria la aplicación urgente de "todos los planes y políticas climáticas, además de nuevas medidas" para que Irlanda cumpla el objetivo de reducción de emisiones del 51%, legalmente obligatorio, para 2030.
En sus últimas proyecciones sobre las emisiones de gases de efecto invernadero hasta 2040, los datos de la EPA indican que Irlanda tendrá dificultades para cumplir sus presupuestos de carbono durante la próxima década debido a "una brecha significativa" entre éstos y las emisiones previstas, que es mayor en los sectores de la agricultura y el transporte.
Se calcula que las emisiones totales de gases de efecto invernadero aumentaron un 6% el año pasado, según las previsiones de la EPA, pero el presupuesto quinquenal de carbono hasta 2025 adoptado por el Oireachtas (parlamento) exige que las emisiones se reduzcan un 4,8% de media cada año. El presupuesto hasta 2030 exige una reducción del 8,3% de media cada año.
"Se requiere una reducción de las emisiones de metano de casi el 30% para lograr una reducción del 22% en las emisiones de la agricultura", añade. Para ello sería necesario adoptar el objetivo más exigente de una horquilla recomendada por el Consejo Asesor sobre el Cambio Climático.
El Gobierno acordó una horquilla de reducción del 22% al 30% para la agricultura a principios de este año, y está previsto que en las próximas semanas firme los límites máximos de carbono específicos para todos los sectores.
"El sector debe establecer claramente cómo se logrará esto para resolver la incertidumbre sobre su capacidad de cumplir incluso el extremo inferior de la gama de sus objetivos sectoriales dentro del plazo cada vez más corto hasta 2030", dice la EPA.
Con el fin de las restricciones de COVID19, la EPA calcula que las emisiones del transporte aumentarán entre un 18 y un 19% en el periodo 2020-2022. Sin embargo, afirma que todavía es posible lograr una reducción del 39% de los niveles de emisión de 2018 para 2030 si se aplican plenamente los planes y políticas gubernamentales en vigor y las medidas adicionales anunciadas pero aún no aplicadas. Entre las medidas esenciales figuran la puesta en circulación de más de 940.000 vehículos eléctricos para 2030 y las medidas de apoyo a un transporte más sostenible.
La EPA concluye que los exigentes objetivos para 2030 -sobre todo la reducción a la mitad de las emisiones- aún pueden alcanzarse, pero "sólo si se aplican y cumplen todas las medidas previstas". Esto también pondría al país en la senda de la neutralidad climática para 2050.
En ese escenario, el impacto de las medidas de reducción "hará que las emisiones disminuyan a partir de 2023". Los datos indican, sin embargo, que todos los sectores deben hacer mucho más para cumplir sus objetivos de reducción en 2030.
El director de la EPA, Stephen Treacy, dijo: "El mensaje de los autores del reciente informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático sobre la mitigación del clima era claro: es ahora o nunca, si queremos limitar el calentamiento global a 1,5 grados. Sin una reducción inmediata y profunda de las emisiones en todos los sectores será imposible".
Dijo que la diferencia entre los escenarios de "medidas existentes" y "con medidas adicionales" en sus proyecciones significaba que el ritmo actual de aplicación no lograría el cambio necesario para cumplir los objetivos de la Ley del Clima. Es necesario acelerar la aplicación de "medidas adicionales" para cerrar esta brecha, dijo.