Irlanda podría enfrentarse a una escasez de mano de obra
Irlanda se enfrenta al riesgo de quedarse sin trabajadores en la mayoría de sectores de la economía, una escasez que posiblemente empeore en los próximos años, han advertido destacados economistas.
La evaluación se produce después de que las nuevas cifras de la Oficina Central de Estadísticas (CSO) confirmaran que la cantidad de personas con empleo, de 2,5 millones, ha superado "mucho más allá" los rangos anteriores al inicio de la pandemia de COVID19.
Además, el desempleo ha vuelto a caer hasta el 4,8%, cerca de la tasa anterior a la pandemia, y el número total de trabajadores disponibles ha subido a más de 2,6 millones de personas.
Las cifras de la Encuesta Oficial de Población Activa corresponden a los tres primeros meses del año y muestran un gran aumento de la cantidad de mujeres en el mercado laboral, con un fuerte incremento de la tasa de participación femenina.
Las alternativas para que las mujeres se ganen la vida desde casa -como se sugirió durante la pandemia-, sin embargo, siguen sin estar claras en este momento.
Se necesitarán muchos más trabajadores para construir más viviendas y para satisfacer la necesidad de mano de obra que suponen los planes de financiación de las autoridades para adaptar el inventario de viviendas al cambio climático. Igualmente, se mantiene la alta demanda de trabajadores de las multinacionales de tecnología.
Los economistas afirman que las cifras de empleo vuelven a estar por encima de los rangos anteriores a la pandemia y apuntan a una mayor escasez de trabajadores, con mucha menos llegada de trabajadores inmigrantes al país.
Con el tiempo, la escasez podría dar lugar a un fuerte despegue de los salarios en unos pocos años, aunque la demanda podría disminuir rápidamente si la inflación provocada por la guerra en Ucrania diera lugar a una desaceleración del desarrollo financiero de Irlanda o a una recesión en Gran Bretaña.
