Siguen las investigaciones sobre la pareja hallada sin vida en Tipperary
Los detectives de la Garda siguen examinando los objetos personales de una pareja encontrada muerta en su casa de Tipperary en un intento de descubrir las circunstancias de su muerte. Los cuerpos de la pareja podrían haber permanecido sin descubrir hasta 18 meses.
Se entiende que, además de comprobar las fechas de caducidad de los alimentos de la nevera y la despensa, los detectives también están examinando forzosamente los teléfonos móviles y los ordenadores de Nicholas y Hilary Smith.
Asimismo, siguen revisando la correspondencia postal y de otro tipo que había en la casa para ver si hay alguna pista sobre lo que ocurría en la propiedad en las semanas y meses anteriores a la muerte de la pareja, que es originaria del Reino Unido.
Los detectives también están hablando con los residentes locales que viven en el pueblo de Cloneen y sus alrededores, cerca de la remota casa donde la pareja vivió durante unos 10 años.
Aunque los Smith pagaron a alguien 500 euros para que siguiera cortando la hierba mientras les durara el dinero, parece que la pareja no utilizó mucho las instalaciones y servicios locales durante la última década.
Se están barajando varias hipótesis sobre cómo murió la pareja. Habrá que descartar el asesinato-suicidio y el doble suicidio.
Las pruebas toxicológicas también pueden indicar si la pareja pudo sucumbir a la intoxicación por monóxido de carbono.
También se sabe que los detectives están en contacto con las autoridades británicas en relación con la muerte de la pareja.
Aunque ya se han realizado las autopsias, los resultados no son concluyentes y los detectives están esperando los resultados de las pruebas toxicológicas.
Las autoridades británicas podrían ayudar a localizar a los familiares de Nicholas, de 81 años, y Hilary, de 79.
El problema para las autoridades es tratar de localizar a los familiares correctos, dado lo común que es el nombre de Nicholas o Nick Smith.
En la casa no había señales de que se hubiera forzado la entrada, las cortinas estaban cerradas, y la pareja parece haber indicado a los vecinos que iban a vender y mudarse en los meses y semanas anteriores a su desaparición.